viernes, 3 de abril de 2009

Gran Pantalla


Ensayo sobre la culpa: Der Vorleser / El lector


Sin entrar en momentos trágicos ni estridencias, El lector transita por la reflexión sobre la existencia y las consecuencias de la culpa, generada por los actos humanos moralmente cuestionables de muy diversa índole y calibre.

Para los que conocemos un poco la idiosincrasia del alemán actual, la culpa colectiva que éste arrastra está perfectamente reflejada en la película: se trata de una culpa equivalente al pecado original de los católicos, con el que naces, vayas a ser bueno o malo, y del que sólo te puedes zafar parcialmente mediante el bautismo y por la gracia de Dios. La extrapolación en el caso alemán para la eliminación del pecado sería el completo rechazo al nazismo, una vez reconocidos su crímenes, y la constancia de por vida en un mea culpa entonado colectivamente junto con el estado alemán hacia las víctimas, las cuales pueden otorgar la gracia del perdón.

No obstante, no creo que la película se base fundamentalmente en este tema, sino que lo utiliza como excusa y telón de fondo más que oportuno para hablar sobre la culpa que emana de los actos individuales moralmente reprobables y sobre la posterior redención de la misma que cada ser humano pone en práctica en su vida, más pronto, más tarde o nunca y las consecuencias que de esa conducta se derivan.

Una Kate Winslet desgarrada conduce a su “chico” a los abismos de la vida primero y de la muerte después, generándole sin pretenderlo una existencia desgarrada a su vez.

Lo más importante de la película es quizás la constatación de que el mundo es una paleta de grises, donde los seres humanos simplemente buenos o malos no tienen cabida, porque no existen. Todo resulta un poco más complicado.


by SISTER

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