I'm Still Here
Hace unos dos años, justo en la cima de su carrera, Joaquin Phoenix sorprendía al mundo anunciando su retirada como actor para dedicarse de lleno a su carrera como rapero. Desaliñado, barbudo, pasado de peso, drogado y sobretodo actuando como si hubiera perdido la cabeza, Phoenix se convertía en el hazmereir de medios, excompañeros y ciudadanos de apie. Situación que llegaría al extremo tras su grotesca aparición en el Late Night Show de David Letterman.
Pues bien, I'm Still Here, es un falso documental dirigido por Casey Affleck que nos narra el supuesto descenso a los infiernos de la estrella y sobretodo cómo el mundo entero, no sólo se lo traga sino que, explota y golpea cruelmente al pobre "juguete roto".
En definitiva, una interesantísima reflexión sobre la fama, la telerealidad, la credulidad de la masa y la falta de escrúpulos de los medios, que nos regala grandes momentos frente a los que el espectador no sabe sí reir o llorar. Y por encima de todo, el film demuestra que Joaquin Phoenix es no sólo un genio de la actuación sino un artista con una valentía infinita, es decir, de los que parece que ya no quedan.
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