miércoles, 4 de agosto de 2010

Cine


El que recibe el bofetón (1924)

La que fue la primera película de Metro-Goldwyn-Mayer en plena época del cine mudo es la mejor película que jamás haya visto. Bien es verdad que tengo 30 años y me queda mucho cine por delante, pero verdaderamente estamos hablando de cine con mayúsculas, ese que involucra al espectador al tiempo que alcanza altas cotas como expresión artística, todo ello ejecutado por la mano maestra del director Victor Sjöström.

Respaldado por estrellas de la época como John Gilbert y Norma Shearer, el gran Lon Chaney nos brinda una interpretación intensa y conmovedora. El magistral retrato de un loser en toda regla, Paul Beaumont, científico traicionado reconvertido en payaso cuyo exitoso número consiste en dejarse abofetear. Los que andan por mis años y se van a la cama tranquilos pensando que viendo películas de tough guys y mafia cubren el expediente cinéfilo más o menos ligado al rock, deberían ser los primeros en correr a ver esta película sobre UN AUTÉNTICO PERDEDOR, alguien a quien nada le puede ir peor y todavía tiene ganas de poner las cosas en su sitio. Y de paso, hay que echar un vistazo a la interesantísima biografía de Mr. Chaney. No, a veces no es suficiente con peinarse hacía atrás y escupir la palabra "polla" en cada frase.

Increiblemente, todavía no existe una edición en dvd pero podéis encontrarla fácilmente por internet. Eso sí, con los intertítulos en inglés. Un pequeño esfuerzo a cambio de poder disfrutar de verdadera magia en imágenes.

Por BARCHETTO

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